
Desde que vi
este cojín en
Design*
sponge he ido rapiñando camisas viejas, sábanas y retales de tela baratos. Empecé en abril estando en Barcelona donde tengo una cajita llena de yo-
yos listos y ahora gracias a la muerte
útil de un maltrecha camisa de
Placid, un vestido desteñido mío y alguna que otra víctima mas tengo suficientes!
La semana que viene vuelvo a Barcelona
así que podre ver si tanto asesinato textil ha servido para algo o no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario